HELENA & ALEJANDRO

Monestir de Valldonzella & Can Ribas

En el recogido silencio del Monasterio de Santa María de Valldonzella, donde la luz cae suave sobre las piedras antiguas, Helena y Alejandro unieron sus caminos.
Fue una ceremonia hecha de miradas que decían más que las palabras y de promesas que parecían respirar eternidad.
La luz los envolvió como un abrazo del cielo, y por un instante, el mundo pareció detenerse.

Desde allí, el día siguió deslizándose hasta Can Ribas de Montbui,donde la naturaleza, la música y las risas se unieron sin romper la magia, tejiendo un mismo latido: un eco de amor suspendido en el aire,
como un amanecer que nunca termina.